Third place
Hoy en día, nos encontramos en un proceso continuo de transformación, consustancial al propio concepto de la sociedad, y a su naturaleza cambiante, sujeta a la influencia de gran cantidad de factores. Los cambios generacionales representan un factor capital en dicho proceso y su forma de consumir y habitar los espacios.
Esta nueva forma ver y vivir la realidad pretende satisfacer la necesidad de cambio/adaptación y la pertinente recuperación de las formas y costumbre propias de cada tierra, su cultura, en definitiva, de visión de la vida cotidiana que condiciona nuestra forma de consumir y de habitar.
De esta necesidad surgen nuevos conceptos para definir los espacios que habitamos, de forma que se adecuen a nuestra nueva realidad y que nos permiten entender y entendernos mejor en nuestro espacio vital.
Un ejemplo de esta nueva forma de nombrar y entender nuestra realidad emana del concepto “Third place”, término definido por el sociólogo “Ray Oldenburg” y que se asocia a los espacios donde pasamos nuestro tiempo y que no corresponde a la casa (primer lugar) o el trabajo (segundo lugar). Son lugares donde socializamos, intercambiamos ideas, disfrutamos y construimos relaciones interpersonales. Crecer juntos.
Estos espacios cumplen una función esencial en el desarrollo y convivencia de los ciudadanos en los espacios públicos y muestran la evolución de las sociedades.
Third-place, lugares híbridos, lugares alternativos … tantos nombres para hacer referencia a los diferentes espacios plurales que pueblan nuestras calles. Estos espacios abren sus puertas en todo el mundo con el principio; primero de ofrecer un espacio libre y cómodo donde surjan nuevas maneras de intercambiar, de practicar y experimentar las artes, la cultura, de experimentar su ciudadanía… de pensar y de hacer lo común.
En esencia, sus organizaciones, formaciones y propuestas son múltiples, y sus fines diversos y concreto: artístico, ecológico, digital o todo a la vez. Se basan en el deseo de construir y vivir juntos de otra manera, por lo que son abiertas y necesitan una participación de la comunidad. En ellos se valora el debate, la opinión crítica y la toma de conciencia ciudadana. Estos lugares son frágiles pero indispensables para el desarrollo intelectual y artístico individual, colectivo, de una comunidad: de sus habitantes.
En este concepto nos sentimos identificados, representados. Gallo Rojo. Factoría de Creación debe ser visto y vivido como espacio crítico, multidisciplinar, polivalente, cultural, donde compartir. Hagámoslo sostenible entre todas.
Más información sobre el tema en los siguientes enlaces;
https://www.brookings.edu/blog/up-front/2016/09/14/third-places-as-community-builders/
https://www.psychologytoday.com/us/blog/the-good-life/200912/happy-places-third-places
https://www.steelcase.com/research/articles/topics/design-q-a/q-ray-oldenburg/
12 marzo, 2020